miércoles, 1 de abril de 2009

Horacio Quiroga

Nació en Salto el 31 de diciembre de 1878. De joven, en su ciudad natal, fundo y dirigió la Revista de Salto. En 1900 viajo a Paris y allí conoció a Ruben Dario. Regreso a Montevideo, donde llevo una vida bohemia rodeado de amigos, con quienes fundo la tertulia literaria llamada el Consistorio del Gay Saber. En esa época publico su primer libro, Los arrecifes de coral (1901).



Un año después, al examinar un arma cargada, mato por accidente a un intimo amigo. Después de esta tragedia abandono Montevideo y se fue a vivir a Buenos Aires. Allí asistió a las reuniones literarias del escritor argentino Leopoldo Lugones, a quien acompaño en una expedición a Misiones.



Se enamoro del lugar y cuando se caso, en 1909, se mudo a la localidad de San Ignacio, en esta provincia. Allí trabajo como juez de Paz, e intento pequeñas empresas que fracasaron también en este lugar nacieron sus hijos Egle y Dario. Inspirado en el paisaje que lo rodeaba, escribió cuentos sobre temas referidos a la selva, que fueron publicados en Buenos Aires, en las revistas, FrayMocbo, Carasy Caretas El Hogar.



En 1915 su esposa se suicido y al año siguiente Quiroga retorno a Buenos Aires donde ocupo un cargo en el Consulado General del Uruguay. En los anos siguientes publico Cuentos de la selva (libro para niños), Cuentos de amor, de locum y de muerte, Anaconda, El desierto, Los desterrados.

En 1927 volvió a casarse con una joven amiga de su hija y tuvo otra hija al ano siguiente. Regreso a Misiones y publico Mas alía. En 1936 empezó a tener problemas de salud y se separo de su segunda esposa. Internado en un hospital bonaerense se entero de que tenia cáncer y se suicido el 19 de febrero de 1937. Además de cuentos, Horacio Quiroga escribió dos novelas, Historia de un amor turbio y Una estación de amor, amen de una obra de teatro, Las sacrificadas.